Una mirada profunda a la industria musical independiente en Chile

La Industria Musical Independiente de Chile -IMICHILE- presenta un estudio del panorama de la industria musical independiente dentro del territorio de la República de Chile. Bajo el nombre de “Música chilena independiente: oportunidades y nuevas evidencias“, el reporte y análisis realizado por Embodied Reports y en colaboración de Corfo, ProChile, la Sociedad Chilena de Autores e Intérpretes Musicales (SCD) y la Cámara Nacional de Comercio de Chile (CNC), explica a detalle la transformación de todo el ecosistema de la música en todos los niveles de la cadena: creación, comercialización, distribución y consumo, luego de la entrada la tecnología cuya transformación, no solo ha tocado al sector musical desde la década de 1990, sino que ha mermado en todas las industrias creativas o de entretenimiento. 

Desde su introducción crean una visión profunda de la estructura de los bienes culturales, donde la música es una de las piezas clave, y los describen como “un valor más allá de lo monetario, pues producen “externalidades” positivas: valores de existencia (intrínsecamente su existencia produce un bien social), prestigio (son generadores de identidad personal y colectiva), elección (la posibilidad potencial de acceder a ellos es un beneficio social), educación (contribuyen al pensamiento creador y el capital cultural de individuos) y legado (presentan un valor de herencia a futuras generaciones)”. 

Tras abordar el sentido globalizado de las industrias creativas y pasando por al caso específico del papel de la música de manera internacional, el estudio segmenta el desarrollo y situación de la industria musical a nivel Chile. Los datos fueron extraídos de los comportamientos de consumo de Spotify, al ser la plataforma streaming con mayor número de usuarios a nivel internacional y con un catálogo de cerca de 2 mil artistas chilenos de diversos géneros y niveles de popularidad. Los datos presentados, además de mostrar el consumo interno de Chile, compara lo que sucede en dicho país con otras 17 naciones dentro y fuera de América Latina. 

Algunos de las conclusiones más relevantes son: 

• Es evidente que con la tendencia a la alza de la industria musical a nivel internacional, el mercado de la música en Chile sigue esta misma línea gracias a la apertura de les tecnologías, que a su vez, crea un sinfín de oportunidades para los creadores independientes en Chile, quienes tienen el desafío de conocer a sus audiencias y analizar sus preferencias dentro del llamado Bigdata, haciendo uso de herramientas que ofrecen las plataforma streaming, las redes sociales y organizaciones de información de datos musicales (songkick, portaldisc, wikidata). Además, resulta que la música como un bien cultural, también requiere de experiencias en sus fans, por ello Chile sigue los presentes horizontes mundiales en donde son las actuaciones en directo, los espacios para colocarse y conectar con su audiencia. 

• Los patrones de comportamiento de audiencias son muy similares a los dados en México, Perú y Colombia, por ende, lo más probable sería que las propuestas con éxito en Chile, repliquen esta situación en dichos territorios. 

• Brasil y Argentina, se colocan como países con públicos y nichos mucha más cerrados y endogámicos en su preferencias y consumos musicales. Mientras que el público chileno, muestra dispersión respecto al gusto por la música “bailable” en comparación al resto de consumidores en Latinoamérica, aproximándose a los datos arrojados en Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Canadá, que son mercados potenciales para música nacional con menor “danzabilidad”. 

Además de interpretar interesantes conclusiones, el estudio muestras una serie de recomendaciones de corto, mediano y largo plazo para ser tomadas por quienes crean, recrean, nutren y fortalecen la industria chilena, centrándose en:  capacitación, análisis comparativo con mercados y artistas internacional, predicciones de impacto, entre muchos otros. 

Desde aquí puedes consultar el reporte completo que IMICHILE comparte de manera gratuita.