Roger Waters desecha la propuesta de Zuckerberg

En días pasados, Roger Waters hizo parte de una conferencia celebrada en Estados Unidos en apoyo a Julian Assange, fundador de WikiLeaks, quien se encuentra detenido en Reino Unido por la filtración de información clasificada.

Durante su participación,  el legendario bajista y fundador de Pink Floyd dio a conocer el ofrecimiento que Marck Zuckerberg, fundador de Facebook, le propuso para ceder los derechos de su hit “Another Brick in the Wall (Part II)”.

La repuesta de Waters fue contundente, expresó un “Vete a la chingada” pues la canción sería utilizada dentro de una película que pretende darle promoción a Instagram.

“Así que es una carta de Mark Zuckerberg para mí… con una oferta por una enorme, enorme cantidad de dinero. Sólo digo esto por el insidioso movimiento de querer apoderarse de absolutamente todo. Así que aquellos que tenemos algo de poder –y yo tengo un poco en términos de controlar los derechos de mis canciones– lo hacemos de todos modos. Entonces, no seré cómplice de esa mierda, Zuckerberg” dijo, Waters.

Además de estas declaraciones, Roger acusó a Facebook e Instagram de censurar contenido relacionado con el caso de Julian Assange y con las diferentes causas a las que él ha mostrado su apoyo y compromiso.

Su discurso continuó con la fuerte crítica a las raíces de Facebook, donde se calificaba a las personas por su apariencia. “¿Cómo es que este pendejo, que empezó diciendo: ‘ella está bonita, le daremos 4 de 5; ella está fea, le daremos un 1’, cómo diablos consiguió poder? Y, sin embargo, es uno de los más poderosos idiotas en el mundo”.

“¡Vete a la chingada!”: @rogerwaters a Mark Zuckerberg. El músico contó que le ofrecieron “una gran cantidad de dinero” por permitir el uso de Another brick in the wall II para promover Instagram. Lo narró en un acto por la libertad de Julian Assange (@Wikileaks)#VideosLaJornada pic.twitter.com/gEVqaor8Eo

— La Jornada (@lajornadaonline) June 12, 2021

Con estas declaraciones entramos en reflexión de dos temas importantes que nos competen como parte de la industria de la música: autonomía en la decisión de a quién le concedes los derechos de tus creaciones sin dinamitar el trasfondo de las mismas; y el dilema de las redes sociales que aunque son una herramienta valiosa para visibilizar música, e incluso, un arma para la organización y el cambio social, hay que tener cuidado con la información que recolectan y el uso que le dan.

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