“Llegamos y nos vamos a quedar”: perspectivas femeninas en la industria musical
POR EQUIPO FIMPRO
Uno de los grandes desafíos que atraviesa la industria música es el desequilibrio en las oportunidades laborales y de desarrollo para las mujeres. De la misma forma que en otros ámbitos, las trabajadoras del ecosistema musical de Latinoamérica y el mundo, se han reunido y organizado en pro de un movimiento para alzar la voz por el reconocimiento y el trabajo de la comunidad femenina.
En sintonía con estos movimientos, la edición 2019 de FIMPRO abrió varios espacios de discusión para abordar el tema, entre ellos, el taller “Trabajar en la Industria Musical desde la Perspectiva Femenina” con la moderación de Ana Rodríguez, reconocida por su trabajo como mánager con la agrupación Troker; y la presentación de Paula Rivera, vicepresidenta del Instituto Nacional de la Música en Argentina (INAMU); Noela Salas del Encuentro IMESUR; Mónica Saldaña del Festival Nrmal; y Daniela Ribas, de Data SIM.
Para trazar la ruta de todo el movimiento es necesario conocer el panorama y los datos que la misma industria arroja respecto al papel de la mujer en la música. Por ello, comenzó la charla Daniela Ribas, quien desarrolla un trabajo crucial del mercado musical, SIM Sao Paulo, un espacio que también ha funcionado como punta de lanza en la generación de mejores ambientes y oportunidades para las mujeres. Ribas, en conjunto con todo su equipo, han estado investigando la postura de las trabajadoras de la industria en Brasil, tomando en cuenta los resultados de estudios en Estados Unidos y Canadá.
El estudio, que será presentado del 4 al 8 de diciembre en la edición 2019 de SIM Sao Paulo, aborda una serie de interrogantes desde la voz de mujeres brasileñas que contaron su postura en la música cinco años a atrás y cómo se ven cinco años más tarde, como uno de los cuestionamientos elementales para valorar y evaluar las iniciativas que la misma organización ha colocado y planea establecer. Daniela, de la mano de SIM Sao Paulo, camina con paso firme para “sembrar las semillas y evaluar qué estamos logrando”.
Otra de las trincheras por atacar en esta lucha, es darle forma a la congruencia al levantar la voz. Sobre esta línea, Mónica Saldaña funge como Directora del Festival Nrmal en México. Mónica compartió cómo “desde hace cuatro años hemos trabajado en la representación de las mujeres”, obteniendo resultados como este: el 70% de la programación en su última edición, eran mujeres.
La presencia femenina de Chile ocupó la sala con la historia de Noela Salas, quien abordó la importancia de la seguridad personal de cada una de las mujeres para valorarse y “reinterpretarse a sí mismas”. Además, mencionó la relevancia que tiene su labor en la industria con esta perspectiva de género y desde un “espacio de poder que se debe conquistar”.
En este punto, Salas compartió la experiencia de Satélite LAT, una red de mujeres latinoamericanas que contrataca el “no hay mujeres que se dediquen a esto… es que no existen mujeres que hagan esto…”. Con una invitación a que se unan a esta plataforma digital -a la que se pueda acceder a través de esta liga- y con un “llegamos y nos vamos a quedar”, es que todas las y los asistentes al taller aplaudieron y abrieron pasó a la participación de otra de las mujeres en esta lucha latinoamericana.
Levantando la bandera argentina, tomó la palabra Paula Rivera, quien ha ido del darse cuenta y tomar acción, al llevar la agenda de género hasta la política. “Argentina está viendo tiempos inéditos en los que el tema de la mujer va más allá de las diferencias sociales y políticas”, aseguró Paula al contextualizar la lucha de reivindicación de los derechos de las mujeres, creando asociaciones y comunidades como parte de una necesidad coyuntural. El INAMU también presentará, el próximo mes de agosto, un estudio realizado con 4 mil mujeres de la industria musical en Argentina.
El taller culminó con una reformulación del accionar la equidad de género: el primer paso es darse cuenta una misma; el segundo, hacer algo por transformarlo y el tercero, llevarlo a las esferas políticas, deconstruyendo nuestras viejas visiones, posturas y hasta lenguajes.