La Realidad Virtual estuvo presente en FIMPRO
POR Mónica Hernández
La realidad virtual es cada vez un fenómeno tecnológico más cotidiano. Los dispositivos se han vuelto más accesibles, y los videos de 360º abarrotan las redes sociales. Sin duda, la realidad virtual es ahora un recurso que marcará el futuro del arte y de la comunicación. Es por ello que tuvo un papel muy importante en las discusiones angulares durante esta tercera edición de la Feria Internacional de la Música.
FIMPRO es un punto de encuentro para la escena musical contemporánea, y un evento en el que confluyen discusiones que enriquecen el estado actual y futuro de la industria musical. Por lo cual, este nuevo fenómeno tecnológico fue visto desde distintas perspectivas.
Por una parte, en el taller de Producción de contenido para realidad virtual, presentado por el colectivo especializado en tecnologías emergentes, MAXICO, se introdujeron algunos de los aparatos con los cuales se producen estos contenidos. Asimismo, se mostraron las distintas posibilidades que la realidad virtual propicia a la hora de contar una historia o distribuir un producto musical.
Algunos de estos productos audiovisuales que han aprovechado las ventajas de la realidad virtual fueron presentados en la exposición Realidad Virtual y Música, en Vía Libertad. Esta actividad fue la primera interacción virtual de muchos amantes de la música que formaron parte de esta edición de FIMPRO, quienes tuvieron la oportunidad de presenciar proyectos experimentales de Telefunka, Descartes a Kant y de VRTIFY, plataforma musical cuyo fundador participó en un diálogo acerca del impacto de este recurso tecnológico.
En la charla con Facundo Díaz, CEO VRTIFY, se ahondó en las características de este proyecto pionero en el que la música, la realidad virtual, el contenido 360° y la realidad aumentada confluyen para formar una “mixed reality” que parecería propia de la ciencia ficción.
Esta herramienta tecnológica, como mencionó el colectivo MAXICO, compuesto por Gerardo Martínez, Héctor Valdez y Misus Ricalde, es una oportunidad de construir contenidos con los que la audiencia logre interactuar de distinta manera. De forma que la creación de productos inmersivos puede ser también un recurso de cambio social positivo, con el que nuestro día a día esté inmerso en música.