La música nos une: relación México-Estados Unidos en la coyuntura actual
POR Laura Patricia Grajeda Cortés
Leigh Ann Hahn, Gil Gastelum, Elena Rodrigo y Tim Wilson generaron un diálogo respecto a los retos y oportunidades que enfrentan los artistas latinoamericanos, a través de la relación comercial entre México y Estados Unidos.
En el nuevo contexto político, ¿cuál es la ventaja que tenemos los latinos en el mercado de Estados Unidos, tomando en cuenta que debido a la imigración se ha generando un contenido musical diverso que representa a todas las culturas que son parte de la comunidad americana? Los exponentes reconocieron la ventaja competitiva latinoamericana en la que el hispanoamericano tropicaliza la música, toma un género musical y lo modifica tomando un sentido diferente. Eso gusta en Estados Unidos. Además, la demografía en Estados Unidos permite que, encontrar una nueva voz con un nuevo estilo siempre sea un atractivo.
Elena destacó la importancia de abrir mercados, recuerda la dificultad que implicaba encontrar material latinoamericano en Estados Unidos hasta hace algunos años.
“Los latinos están haciendo un trabajo sensacional en el sur de California, en muchas ocasiones no tienen todo este atractivo en venta de boletos, pero parte de ese reto es para el programador. Tenemos que ayudar a los grupos con la situación de los fondos, las visas, hacer que nuestro artista llegue al concierto, a la gira”, especificó Elena.
Los presentadores destacaron las complicaciones de la obtención de visas, una de las limitaciones y dificultades para los grupos latinoamericanos. Sin embargo, resaltaron que la industria musical es igual de difícil tanto para las agrupaciones estadounidenses como para cualquier banda de otros países. “La única diferencia es que allá no tienen el problema de las visas, pero el reto es el mismo. Incluso puede ser más porque el público ya sabe que son locales, y nadie es profeta en su tierra”, recalcó Elena.
Leigh Ann Hahn, directora de programación de Grand Performances, manifestó la necesidad de pelear todos los días, especialmente como artista, pues en todo lugar será marginado. Primero hay que derribar los muros dentro y seguir adelante.