La música en Brasil da grandes saltos

La industria musical en Brasil se está levantando y hay claros indicios de cómo en medio de una crisis económica y política que ha desembarcado en una clara desigualdad social y bajo poder adquisitivo de la mayoría de los brasileños, el sector se muestra positivo.

La música grabada en Brasil aumentó 17.9% en 2017, mientras que la transmisión streaming logró un crecimiento del 64%.  Dichos porcentajes, colocan al territorio brasileño como el noveno país dentro de la lista de los principales mercados de la música en el mundo, según los datos publicados en el Global Music Report de la Federación Internacional de la Industria Fonográfica (IFPI por sus siglas en inglés).

La Fundación Getúlio Vargas, registro 220 millones de dispositivos móviles, dentro de una población brasileña de 207.6 millones de personas, con miras a que durante el 2019 los ciudadanos brasileños utilicen dos dispositivos portátiles. Estos números llaman la atención de las empresas dedicadas a la transmisión de música, visualizando a Brasil como terreno fértil.

La música sertaneja, también está jugando un papel clave. Su auge comenzó durante la década de los 80 y 90 como un estilo country a la brasileña. De las 100 canciones más escuchadas en las radios brasileñas durante en 2015, 75 eran de sertanejo. Ahora sigue siendo uno de los géneros preferidos por los escuchas brasileños, tal es su apogeo que inversionistas y empresarios comienzan a invertir en el desarrollo del género.

Géneros musicales determinados por las brechas económicas

JLeiva Consulting junto a Datafolha Survey, publicaron “Culture in Capitals”, un estudio realizado a 10,630 brasileños (mayores de 12 años), y originarios de distintas ciudades brasileñas.  

El 64% de los encuestados coloca el ir al cine como su actividad cultural preferida, dejando el asistir a espectáculos en vivo en segundo lugar con el 46%.

El sertanejo, como ya mencionamos, es el género preferido, seguido por la música popular brasileña (MPB), el rock, gospel, pagode, y pop. De las 12 ciudades que participaron en el estudio, la mitad de ellas está reinada el sertanejo: Belo Horizonte, Brasilia, Curitiba, Manaus, Porto Alegre y Sao Paulo.

La música popular brasileña y el rock son los géneros musicales más escuchados por quienes gozan de mayor poder económico. Mientras que las clases sociales C, D y E optan por el sortanejo.

Los rangos de edad también parecen determinar el tipo de música escuchada. El 55% de las personas de 12 a 15 años prefieren la música funk; las de 16 a 24 años escuchan más música pop (28%) y rock (26%); mientras que las mayores de 25 años gustan del sertanejo, MPB y música gospel.

 Anitta, boom del pop brasileño

La industria musical se ve atraída por el éxito que está teniendo la cantante brasileña, Anitta. Las estrategias de marketing que ha manejado están encaminadas en direccionar su desarrollo en el mapa internacional. Un ejemplo de ello son las canciones que hizo con la colaboración de Iggy Azalea, Maluma, J Balvin y Alesso.

Sin embargo, Anitta, al igual que otros artistas brasileños, siguen invirtiendo en el desarrollo de su carrera por radio y televisión, a pesar del aumento de las nuevas formas de consumo musical.

Toda esta serie de factores, han hecho que agentes del sector musical vean a Brasil como la nueva plataforma de pop. Así, parece florecer la industria musical de este país tanto en consumo como en artistas por exportar, y esto, dentro de un contexto en donde América Latina se convierte en una de las regiones que menos paga por el servicio streaming. De los 640 millones de latinos, solo el 5% lo hace, la razón: la pobreza arraigada, planes móviles de prepago y fluctuaciones monetarias.

Con información de: Music Ally y Digital Music News