Iberoamérica estalla en FIMPRO
POR Omar Magaña
La música iberoamericana tiene garra. FIMPRO presentó en su showcase de cierre de la primera jornada a tres proyectos de nueva generación que constatan tal afirmación.
La Santa Cecilia (México-Estados Unidos), Diamante Eléctrico (Colombia) y Tulipa Ruíz (Brasil) presentaron a los profesionales de la escena musical un excelente banquete del cual será preciso servirse en el armado de los festivales venideros.
Los mexicoamericanos: firmes y muy bien estructurados, dejando muy en claro que lo suyo se cuece entre el East Side angelino -donde las grabadoras de mamá y abuela aún sintonizan norteña, bolero y vallenato- y los suburbios donde se ha consolidado una escena rockera californiana de emo punk, rock, rock surf y un largo etcétera. La Santa Cecilia convierte cualquier ritmo latino en avalancha, tan sólo hay que ver y escuchar con cuánto ímpetu pega el baterista; pero La Marisoul (frontwoman) y compañeros abordan con sumo cuidado y respeto los boleros y las versiones más ligeras de temas clásicos del rock. En C3 presentaron su aproximación latina a “Strawberry Fields Forever” de The Beatles.
Diamante Eléctrico sugirió algo completamente distinto. Fue un viaje a la inversa, si La Santa Cecilia veía desde el norte hacia el sur del continente, los colombianos nos regresaron al origen del rock, hacia Norteamérica, a la guitarra más cruda, al golpe conciso. Como su logo lo anuncia: la música y el directo de Diamante Eléctrico son descarga pura, muchos watts transferidos por los amplificadores, muchísima juventud en tres músicos que quieren romper el escenario.
Tulipa Ruíz, por su parte, no podía más que entregar algo que rompiera la norma. Fue una sorpresa para todos: una frontwoman bien plantada en el escenario que fue creciendo poco a poco, una voz portuguesa que se fue multiplicando, diversificando, expandiendo junto a un trío perfectamente ensamblado y sólido.
La Tulipa que comenzó el recital muy firme y vertical ante el stand del micrófono mutó. Cabello desacomodado, lápiz delineador corrido, una audiencia que tuvo que gritar y pedir más para terminar de asimilar que un torbellino venido de Brasil sacudió toda la noche.